La actuación llegó a estar registrada en el libro Guinness World Records.
Quizá en algún momento de tu vida hayas sentido frustración por la inesperada brevedad de un concierto esperado con ilusión e impaciencia. No todos los artistas apuestan por ofrecer espectáculos largos y sólo unos pocos se embarcan en presentaciones maratonianas que consiguen superar las dos o tres horas en directo.
No obstante, podríamos garantizar que jamás has presenciado uno tan corto como el celebrado el 16 de julio de 2007, durante la gira canadiense del peculiar dúo The White Stripes. Duró apenas cincuenta segundos y consistió en la interpretación de una única nota después de prometer en una entrevista radiofónica «un espectáculo secreto e inesperado como ningún otro». Evidentemente, cumplieron su palabra.
Aunque este particular récord mundial dejó a muchos seguidores con la sensación de haber sido engañados, para Jack y Meg White siempre será uno los momentos más recordados en su trayectoria.
Jack tocó una sola nota mientras Meg golpeó el platillo, dando inicio y final al concierto. «Oficialmente hemos tocado en cada provincia y territorio de Canadá», declaró orgulloso Jack White antes de abandonar el escenario.
Por un tiempo, el surrealista evento fue incluido en el Libro Guinness de los Récords como el concierto más breve de la historia. Sin embargo, en 2009 fue retirado por la institución al considerar que no era digno de mención.
Esta decisión molestó bastante a Jack White, quien no dudó en criticar su falta de criterio. «Son una organización muy elitista. No hay nada científico en lo que hacen», afirmó el músico contrariado.
Desde ese momento, han sido muchos los músicos y youtubers que han imitado el famoso concierto de una nota.
Con una guitarra y una batería navegando por el garage-punk, The White Stripes siempre serán recordados como una de las formaciones más extrañas del rock. En contra de lo que muchos siguen pensando, Jack White y Meg White no son hermanos, sino matrimonio. Entre sus mayores éxitos, destacan temas como «Cannon», «The big three killed my baby», «Broken bricks», «Feel in love with a girl», «Black math», «Blue orchid» y su emblemático «Seven nation army».
Después de seis discos de estudio, uno en directo y dos en vídeo que alcanzaron un volumen de ventas cercano a los 10 millones de copias, sumando además tres premios Grammy al «Mejor Álbum de Música Alternativa» (uno para cada uno de sus tres últimos discos), anunciaron su retirada definitiva de la música en 2011.